¡Espero que estéis bien! Yep Yep Yep vuelve a la carga con más historias, ¡esta vez desde Patagonia!
Después de trabajar un poquito en Bariloche, Argentina, crucé al pueblecito chileno de Futaleufú, primer paso para ir a visitar a mi amigo Roberto en Coyhaique para Nochevieja. Sólo pasar la frontera, pasé de la sequedad y el viento, a la humedad y el mundo rural, del «che boludo» y de la «sh» de botella, al «po» y la cantinela chilena.
De aquí a Coyhaique hay 400 kilómetros de naturaleza salvaje, glaciares y lagos que confirman la idea de lugar indómito que tenía de Patagonia. Tardo 12 horas en llegar, circulando lentamente por una carretera en gran parte no asfaltada, llena de baches y salpicada de algún pueblecito cada algunas horas.
La llegada a Coyhaique no puede ser mejor, gran acogida de la familia de mi amigo Roberto y gran comida: ¡sopa de patatas, carne, choclo (maíz), cilantro y ají! Buenísimo! Y por la noche, cena de Nochevieja con ceviche de salmón y Chupe de Jaivas, un plato de cangrejo con pan, cebolla y vino blanco todo gratinado, ¡y regado con grandes dosis de vino!
El almuerzo para empezar el Año fue también bien patagónico: un asado de cordero (cordero al palo). Lo atan con alambre a una doble cruz metálica y lo asan al fuego durante 3 horas, entero.
Excursión a Cerro Castillo
A pesar de la belleza del entorno, los caminos de la zona no están marcados ni habilitados para el trekking.
Con Roberto y Pacha recorremos uno de los pocos que está un poco marcado: el Cerro Castillo. Es una ruta muy bonita de tres días y se encuentra un poco al sur de Coyhaique.
Tomamos el bus y bajamos en «Las Horquetas» y caminamos 3 días por valles con bosques de falso haya (Nothofagus), glaciares colgantes de picos puntiagudos sobrevolados por algún cóndor y lagos de colores azules únicos. ¡Espectacular!
Puedes ver un mapa de la ruta aquí:
La ruta es de 37 km, +1366 y -1826 metros. ¡Es una ruta bastante fácil y muy escénica!
¡Saludos!
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